Mirad
que original y “dulce” manera os presentamos para enseñar a los niños las fases
de la luna. Para hacerlo solo necesitamos galletas de tipo “oreo”, y unos
dibujos o fotografías de la luna en sus diversas fases.
Lo
que haremos será separar las dos caras de la galleta procurando que toda la
parte blanca quede en una de ellas y a continuación y ayudándonos de un pequeño
cuchillo “moldearemos” las diferentes formas de la luna, de manera que en la
bandeja queden tantas galletas con su “luna” correspondiente como fases tiene
nuestro satélite natural.
Cuando
estén todas listas, y después de explicarlas, podemos proponer a los niños un
juego muy “glotón”: Vamos a comernos la luna, que consistirá simplemente en
pedir a los niños que se coman la luna llena, o la luna en cuarto creciente, o
la luna nueva… si aciertan podrán zamparsela!! Seguro que la clase se
convierte en una merienda muy interesante.
Tomado
de: http://actividadesinfantil.com/archives/10494
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